El Cessna robado en el Aeroclub Chaco. Foto: @jetphotos.
La investigación del robo de una aeronave desde el Aeroclub Chaco ocurrido en plenos festejos navideños se mantiene en un camino en que abundan las especulaciones, pero en el que aún faltan las certezas.
Por el ‘botín‘, la principal hipótesis que maneja la Justicia provincial es que se trataría de un golpe vinculado con el narcotráfico, pues este tipo de aviones es el ‘ideal‘ para el tráfico de sustancias por vía aérea, maniobra habitual en esta región: el aparato atraviesa la frontera, llega hasta un punto determinado, ‘bombardea‘ la carga en un campo y regresa o baja y se deja abandonado, incluso muchas veces cae.
En medio de una zona muy boscosa, una pista de aterrizaje en el sitio hasta donde pudo seguirse el transponder de la aeronave robada en el Chaco.
Lo cierto es que no son aquellas grandes flotas de aviones que supieron tener en su apogeo los carteles colombianos o mexicanos, sino meras herramientas que se utilizan aunque sea una vez y, si es necesario, se descartan, por lo que el ‘robo‘ es una de las principales formas de hacerse de ellas. Ahora bien, el lugar hasta donde pudo ser rastreado el avión, ya sea porque el piloto ‘se olvidó‘ de desconectar el transponder o porque cuando aproximo al punto lo apagó para maniobrar de manera visual y evitar una geolocalización directa, es una zona ‘caliente‘ del contrabando internacional, no solo para drogas, sino para todo tipo de cosas, incluso armas y personas.
A la izquierda, en Bolivia, el punto donde se perdió el rastro de la avioneta. A la derecha, en Brasil, el municipio de Corumbá a solo 110 kilómetros por ruta.
El ‘trackeo‘ del Cessna 206 Stationair matrícula LV-KEY (que podría haberlo hecho en tiempo real cualquier usuario de una popular página de Internet) llega hasta El Carmen Rivero Tórrez, un municipio de poco más de 6000 habitantes de la provincia boliviana de German Busch. Una sencilla observación por el servicio GoogleMaps del punto hasta donde llega el rastreo, permite ver que donde se pierde la señal existe una importante pista de aterrizaje en medio de una zona boscosa, pero a muy pocos metros de una importante ruta boliviana, la número 4, que lleva directamente hasta la frontera con Brasil que queda a poco más de una hora en vehículo terrestre.
Predio del Aeroclub Chaco, a 30 kilómetros de Resistencia por la ruta 11, donde se produjo el misterioso robo en la madrugada navideña.
Del lado brasileño de la frontera se encuentra Corumbá, en el estado de Mato Grosso del Sur. Según el sitio de la fundación especializada InSight Crime, Corumbá es una pequeña población de solo 110.000 personas, ‘cuya desproporcionada participación en contrabando entre Bolivia y Brasil es testimonio de su estratégica ubicación sobre el río Paraguay‘. Señala que ‘las disputas de las organizaciones criminales por las rutas de tráfico de cocaína hacen que Corumbá mantenga su relevancia para el movimiento ilegal de migrantes y mercancías‘.
Remarca finalmente InSight Crime que el estado de Mato Grosso del Sur, donde se ubica Corumbá, ‘es vital‘ para la empresa criminal transnacional con sus redes fluviales y sus densos bosques, ‘que ofrecen la cubierta ideal para el movimiento de personas, animales, armas y drogas‘, señalando que las principal banda que opera en la zona es el temible Primer Comando de la Capital (PCC).
Máximo Thomsen es el más “complicado” de los rugbiers acusados en el juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa. La Justicia tiene elementos probatorios que lo posicionan como quién dio el golpe final que termino con la vida del joven a la salida de un boliche de Villa Gesell. Este lunes 6 de febrero será el veredicto.
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El acusado siempre vivió en la ciudad de Zárate junto a su familia. Debido a la situación judicial que atraviesa Máximo, su madre, Rosalía Zárate renunció al cargo de Secretaria de Obras Públicas en la ciudad de Zárate.
¿Quién es Máximo Thomsen?
Tiene 22 años y hasta antes que ocurriera el asesinato en la ciudad balnearia, Thomsen estudiaba Educación Física en la ciudad de Zárate.
El joven practicó rugby a lo largo de toda su infancia en el Arsenal Zárate. Pero en 2017 se unió al Club Atlético de San Isidro (CASI), que actualmente lo suspendió.
Desde el equipo aseguran que el joven nunca se “integró”. Según consignó Clarin, sus compañeros lo describen como alguien“bastante callado”.
Es señalado por la Justicia como el rugbier que le dio la patada mortal al adolescente asesinado a golpes, el 18 de enero de 2020, a la salida de un boliche de Villa Gesell.
Una de las pruebas que incriminan a Thomsen es una zapatilla de lona negra manchada con la sangre de la víctima que le pertenecía. La encontraron en la casa que los rugbiers habían alquilado en la costa.
Del mismo modo, un audio de WhatsApp entre amigos en común de los rugbiers expuso la actuación de Thomsen en el crimen. “Le pegó no sé cuántas patadas en la cabeza y la última lo mató”, se escucha decir a un joven agendado en el grupo como Juani Neme.
Está imputado por “lesiones graves” causadas a seis amigos del joven asesinado.
Thomsen se negó a someterse a las pericias psicológicas y psiquiátricas solicitadas por la querella y la fiscalía. “Ya violaron muchas cosas privadas mías y no quiero que vuelva a pasar”, justificó.
La defensa de Máximo busca remarcar que, según la declaración testimonial de uno de los médicos forenses que realizó la autopsia de Fernando, no se pudo “determinar cuál de todos los golpes y lesiones que describí en dicha zona fue el que le ocasionó el deceso”. De esta forma busca evitar recibir una pena más alta que la del resto de sus amigos.
Thomsen rompió el silencio por primera vez en el juicio: “Quiero pedir disculpas porque jamás en la vida se me hubiese ocurrido tener intenciones de matar a alguien”.
Una mujer de 42 años y otra de 25 resultaron heridas de bala este domingo por la tarde en la zona sudoeste de la ciudad, en un nuevo hecho de violencia que se suma a los ya registrados durante las últimas horas en Rosario.
Según informaron fuentes policiales, las víctimas se encontraban en la zona de Doctor Riva al 3085, en donde la joven de 25 se preparaba para abrir su negocio. En esa misma cuadra, justo al lado, tiene su domicilio la otra mujer herida.
En ese momento, pasadas las 16 horas, dos masculinos que llegaron en moto efectuaron disparos que alcanzaron a ambas, según relató un hombre que posteriormente las trasladó en su auto hasta el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca).
El personal del efector médico que las revisó constató que la mujer de 42 presentaba múltiples heridas de arma de fuego, mientras que la de 25 tenía un único orificio de bala en la axila izquierda.
Este nuevo hecho de violencia se suma a una saga de balaceras y ataques que, antes de que termine el domingo, dejaba un saldo de 3 muertos y varios heridos en la ciudad.
El hombre que desde hace seis meses llevaría un hostigamiento permanente contra Marta Quintana de 54, y que tuvo su punto de ebullición el viernes 3 cuando se produjo un incidente en avenida Belgrano y Malvinas Argentinas, donde amos trabajaban, deberá en la mañana de este lunes comparecer ante la fiscal de Investigaciones Rosana Soto.
El capataz lleva tres días preso, luego que fuera denunciado por Quintana y su hijo Claudio López. Las cámaras de seguridad ese día tomaron como Aguilar se acerca a la mujer, presuntamente para indicarle el trabajo que debe hacer, mientras Quintana está al lado de una carretilla: la empleada le arrojó un cono de señalización vial por la cabeza y luego se ve a López que interviene y lo saca a Aguilar del frente de su madre de un golpe de puño.
En la denuncia de la mujer consta que el jefe de ella le pidió en malos términos que volviera a hacer un trabajo y además, que le exige usar la pala cuando hay tareas que no puede cumplirlas porque es paciente en recuperación de cáncer de mama. En ese sentido, los constantes asedios sin respetar el cuadro de salud de la trabajadora, ha llevado en estos meses a una relación tirante.
Marta Quintana, asegura que es hostigada desde hace seis meses por parte de su jefe y radicó una denuncia.
Por eso, las cámaras captan cuando aparece el hijo de Quintana y agrede al capataz. El hostigamiento viene desde hace tiempo. Por otro lado, la víctima y otros empleados sabían que Aguilar llevaba una pistola en la riñonera, por eso en los videos registrados por testigos se puede oír que la mujer a gritos pide que se le saque el arma, algo que luego se comprobó con el arribo de los policías: tenía una pistola Bersa Thunder 380 y hoy tendrá que explicar qué hacía con una pistola en el trabajo y en la calle.
NORTE pudo saber de fuentes judiciales que el hombre tenía el permiso vencido y no cuenta con la habilitación para portación, por lo que fue el motivo principal que llevó a la fiscal a ordenar que permanezca detenido y citarlo para declaración de imputado. Por otro lado, también el Ministerio Público dispuso se entregue un botón de pánico para la víctima y para el hijo, dispositivo que le fue cedido el mismo viernes de manera inmediata.
EL REPUDIO Y LA PREOCUPACIÓN EN EL MUNCIPIO
El violento episodio que deberá dilucidarse que fue lo que pasó, obligó a las autoridades municipales a repudiarlo y garantizar la integridad de los trabajadores. Fue el subsecretario de Servicios, Luís Alonso, quien dejó en claro que el gobierno municipal impulsa una política de erradicación definitiva de todas las violencias en todos los ámbitos de la municipalidad.
‘Yo pensé que era una cuestión superada, que habíamos superado viejas prácticas a partir de la revalorización y jerarquización; a partir también de generar las mejores condiciones para todos los compañeros trabajadores y en muchos casos dando la oportunidad de que cada uno elija el lugar donde quería desempeñar su tarea con el fin de aportar a una armonía que termine significando una mejor prestación de los servicios‘, reconoció.